Adolphe Sax y la revolución "saxual" del mes de abril
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Adolphe Sax y la revolución «saxual»

Muchos de vosotros os preguntareis por qué celebramos en Abril el mes del Saxofón en SANGANXA. Pues nada, en este artículo te traemos información del proceso de humanización «saxual» de nuestro preciado instrumento. Pero antes es importante conocer el origen y la difusión del saxofón.

 

Un poco de historia, Adolphe Sax

Antoine-Joseph, más conocido como Adolphe Sax (Dinant, 1814 – París, 1894) fue inventor y fabricante de instrumentos musicales. Se dio a conocer a mitad del siglo XIX, cuando el principal objetivo para la fabricación de instrumentos era la afinación conjuntamente con la facilidad de emisión y simplicidad de las digitaciones. 

El propio Sax, encargado de dirigir el taller de su padre (Charles-Joseph Sax), sintió la necesidad de crear un instrumento de viento que pudiera aproximarse a la dulzura de los instrumentos de cuerda pero al mismo tiempo tuviera la fuerza e intensidad como los instrumentos de viento-metal. 

Adolphe Sax estudió clarinete, y es después de estos estudios cuando se dió cuenta de las imperfecciones de este instrumento y al mismo tiempo se obsesionó en su mejora.

Biografia de Adolphe Sax
Adolphe Sax, 1841

Es concretamente en Bruselas, en 1840, donde diseñó y construyó el saxofón, en sus principios llamado saxophon o saxophono. Según M.Habeneck, en 1840, director de conciertos del Conservatoire Royal Bruxelles y gran admirador de Sax: 

Los compositores deberán mucho al Señor Sax, cuando sus instrumentos pasarán a ser usados generalmente (Rovire, 2004).

En junio de 1842 Adolphe Sax se encontraba en la capital francesa, y recomendado, obtuvo una cita con Hector Berlioz. El apoyo de este gran compositor, especialista en sinfonías, pudo ser determinante para su carrera. Berlioz parecía interesado en sus ideas y sus instrumentos modernos. El apoyo de distintas personalidades del mundo de la música, facilitó la gran carrera de Sax como inventor de instrumentos. 

Finalmente en octubre de 1842, Sax se instaló en la calle Neuve-Saint-Georges de París, donde construyó un pequeño taller en el que desarrolló su nuevo invento (el saxofón). Poco a poco este humilde taller se fue transformando en una fábrica que distribuyó más de 20.000 instrumentos entre 1843 y 1860.

Adolphe Sax modificó y completó las familias de casi todos los instrumentos de viento metal y madera. Llegó a registrar hasta 26 patentes. Inventó nuevos tipos de instrumentos como los saxhorns patentados en el año 1843. 

sax horns
Familia de Saxhorns

En 1845 patentó los siete tipos diferentes de saxotrombas. Es concretamente el 21 de marzo de 1846 cuando realizó su primera patente de saxophones.

Según el propio Adolphe Sax (1846): 

Mejor que cualquier otro instrumento, el saxofón es susceptible de modificar su sonido a fin de poder dar las calidades que convengan o de poder conservar una igualdad perfecta en toda su extensión. Lo he fabricado de cobre y en forma de cono parabólico. El saxofón tiene por embocadura una boquilla de caña simple. La digitación es como la de la flauta y la del clarinete. Por otra parte, se le pueden aplicar todas las digitaciones posibles (Matas, 2008).

La decisiva «batalla» del mes de abril

Una de las principales formas de difusión de este instrumento fue gracias a las bandas o músicos militares. En 1830 se creó la Gymnase de Musique Militaire, una institución formada con el fin de reorganizar las bandas de la armada francesa. Esta escuela, que tendió a conservar las antiguas tradiciones, era una academia para el entrenamiento de músicos y directores franceses. Los instrumentos que se impartían normalmente eran de viento. Su primer director fue Michell Carafa.

Adolphe Sax, conjuntamente con la ayuda del Gerenal Marie-Théodore Gueullin (1789-1860), intentó cambiar la instrumentación de las bandas francesas. En este punto se produjeron diversos enfrentamientos, y por ese mismo motivo se creó una comisión para probar las distintas instrumentaciones. Para esta ocasión se reclutaron dos bandas y se les obligó a tocar una composición preparada por los miembros de la comisión y que en este caso fue compuesta por Adolphe Adam (1803-1856). Uno de los requisitos importantes es que cada formación no superará los cuarenta y cinco miembros.

carafa sax
Plantilla de Carafa vs Sax

Carafa disponía de una plantilla en donde el 60% eran instrumentos de madera, alguno de ellos, como los oboes y los fagotes, tenían una débil sonoridad en espacios al aire libre. En cambio, Adolphe Sax tenía un 24% de instrumentos de madera, siendo el resto instrumentos de metal inventados por él mismo. Su plantilla ofrecía un sonido más oscuro y homogéneo, y con los metales tenía una mayor potencia y sonoridad en el registro grave. 

… se examinarán los nuevos instrumentos: si los de Sax son mejores, deberán ser adoptados…” (Héctor Berlioz, 1 de abril de 1845). 

El 22 de abril de 1845 se organizó una gran manifestación en Le Champ-de-Mars (París). El sistema antiguo fue defendido por 45 músicos profesionales dirigidos por Michele Carafa. En cambio Sax defendió el suyo con 44 músicos. Cómo dato curioso, Sax fue ovacionado por más de 20.000 personas. Y de ahí, que en Sanganxa celebremos el mes de abril como el mes que vio triunfar al saxo.

La banda militar de Sax desde sus primeros acordes mostró su superioridad […] la homogeneidad dada por esta nueva familia instrumental…” (Hector Berlioz, 24 de abril de 1845).

 

Finalmente el 19 de agosto de 1845, publicada dentro el Moniteur de l’Armée, la comisión se decidió a favor de Sax. Una resolución ministerial impuso dos saxofones (barítono y alto, en lugar de los fagotes y oboes) en las bandas de música de los regimientos de infantería. 

A partir de 1847, no obstante, el instrumento, aunque vilipendiado por los adversarios de Sax, logró un importante éxito: se abrió una clase de saxofón en el Gimnasio Musical Militar y el 12 de octubre tuvo efecto el primer concurso de saxofón en la historia musical” (Gourdet, 1965).

 

La Revolución de 1848 suspendió este decreto durante seis años. Finalmente, el 16 de agosto de 1854 mediante un «Decreto Imperial» se fijó la reorganización de las bandas de música de los regimientos. Al mismo tiempo se ordenó la incorporación de ocho saxofones: dos sopranos, dos altos, dos tenores y dos barítonos o bajos. Las bandas de infantería tenían mayor cantidad de músicos que las de caballería, además debían tener una textura más compensada debido a los instrumentos de madera. 

Gracias a los saxhorns, los saxotrombas y los saxofones podemos decir que se ha producido dentro de la música militar una transformación radical” (L’illustration, 1848)

 

Con la familia de los saxophonos ha introducido en las músicas militares un sonido nuevo, cuya hermosura ha sido debidamente apreciada por el ilustre Rossini, habiendo dicho aquel gran maestro que el saxophono tenía el sonido más hermoso que jamás hubiese oído. Regeneradas de este modo las bandas de música del ejército, han adquirido su verdadero rango, y hoy en día pueden considerarse superiores a las más afamadas de Austria, Prusia y Bélgica” (Tolosa.1862).

El regimiento de caballería disponía solo de instrumentos de metal, siendo una mayoría inventados por el propio Adolphe Sax.

Para ir finalizando estas líneas, la ocupación en España por parte de las tropas francesas de Napoleón Bonaparte propició el nacimiento de las bandas de música que hoy en día conocemos. Éstas acompañaban a los militares en las campañas animando a las tropas, hecho que produjo un gran contacto en gran parte del territorio español, especialmente en tierras valencianas. A partir de 1825, aproximadamente, las bandas militares representaban la gran mayoría de acontecimientos musicales y poco a poco fueron ampliando su contacto con la población civil hasta nuestra actualidad.

Se podrían escribir muchas más páginas, pero hasta aquí una primera aproximación al nacimiento y la difusión de nuestro instrumento. Diversas patentes, una familia amplia y versátil, diferentes novedades técnicas como las del nuevo Supreme y otras más digitales como el Yamaha YDS-150. Todo gracias a la primera semilla que sembró Adolphe Sax.

No importa el modelo, el tipo, el material, el color, la marca o la altura, lo más importante y necesario es que la historia de este preciado instrumento no decaiga y se puedan seguir escribiendo nuevos capítulos de su constante y necesaria evolución.

ELADIO SELLÉS NAVARRO 5/04/2022

www.breathingsax.com