MEJOR PREVENIR QUE…
El tudel es muy importante en los instrumentos de viento metal. Después de la boquilla, es la parte más cercana desde donde se inicia el sonido. Muchos instrumentistas lo modifican o piden que se les diseñe según sus necesidades musicales. Son conscientes de la importancia que tiene el tudel para el buen funcionamiento del instrumento. Por eso desde el taller Sanganxa queremos explicarte brevemente cómo limpiarlo fácilmente en tu casa. En el caso de que tu instrumento sea de pistones será más sencillo. Si tu instrumento es de cilindros, llévalo a tu taller. Que te desmonten el primer rotor y te limpien el tudel.
En cualquier caso, nunca debes esperar a que el tudel de tu instrumento se estropee. Es fácil que entonces te lleves un dolor de cabeza cuando te digan que hay que cambiarlo porque se ha perforado debido a la falta de mantenimiento preventivo. Además te sorprenderá todo lo que puedes encontrar dentro.
En caso de un tudel perforado, una solución a corto plazo puede ser ponerle parches para tapar los agujeros. No obstante, esta solución no puede emplearse a largo plazo. El tudel seguirá deteriorándose por dentro hasta que llegue un momento en el que no se le puedan poner más parches y toque cambiarlo. Por otra parte, poner parches tiene consecuencias en el sonido del instrumento. Al poner más metal, y sobre todo en el tudel, el timbre del instrumento se modifica perdiendo armónicos y cambiando el color del sonido. Para evitar todo esto, lo mejor es prevenir. Puedes hacerlo tú mismo, o llevarlo para que lo limpie un técnico.
Para limpiarlo sólo necesitas: agua, un jabón neutro y un cepillo flexible del tamaño que le sirva a tu instrumento. Nunca utilices otra clase de cepillos. Sobre todo no utilices los que no sean flexibles ya que se te podrían quedar atrapados.
En caso de los instrumentos de pistones, saca el primer pistón y su correspondiente tapa inferior y muelle (asegúrate de colocarlos en un sitio donde no puedan sufrir ningún daño mientras lavas en tudel). A continuación echa agua en el tudel por la entrada de la boquilla y luego aplica en el cepillo jabón e introdúcelo de la misma forma (si estás utilizando el cepillo correcto para tu instrumento no tengas miedo que no se te quedará atrapado) y, para finalizar, aclara con bastante agua limpia. Posteriormente no olvides secar bien tu instrumento, para esto te puedes ayudar de un secador de cabello de casa utilizándolo con aire frio.
Para los instrumentos con rotores debes seguir el mismo procedimiento, pero desmontando el primer rotor. Si no sabes cómo hacerlo, mejor llévalo a un técnico cualificado.
Esperamos que esta entrada te haya sido de ayuda. Recuerda que siempre es mejor prevenir para luego no llevarnos sorpresas. Te invitamos a que leas nuestro próximo post sobre mantenimiento preventivo de los pistones y los rotores de tubas y bombardinos.